La lectura, instrumento para cambiar el mundo
Nos
podemos plantear la siguiente reflexión, ¿el alumnado debe leer por gusto o por
obligación? Según me han contado mis padres, cuando ellos estudiaban, tenían
que leer por obligación, e, incluso aprender de memoria fragmentos de libros
relevantes. Como experiencia personal de alumna tengo que confirmar que en la etapa
de Educación Secundaria Obligatoria, el peso de los contenidos lingüísticos iba
perdiendo peso y ganaba importancia la lectura como educación esencial en el
ser humano. Ahora, como docente, me propongo diariamente que mi alumnado lea
por placer, por gusto, y que sea él mismo el que de forma autónoma se adentre
en el enriquecedor mundo de la literatura.
Por
lo tanto, debemos tener presente que no todos los esfuerzos resultan inútiles,
se debe empezar por poco y de forma constante para cambiar la educación y la
sociedad con el instrumento de la lectura.
Estamos
en Navidad, ¿qué mejor ocasión para regalar libros a toda la familia?
¡Felices fiestas!